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Debilidad de las Farc fortalecerá la inversión |
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Bogotá, 27-Sep-2010 (Prensa CID). La caída del jefe guerrillero alias ‘Mono Jojoy’ representa un aire y un refresco al recrudecimiento de la guerra por parte de las Farc que había arreciado como una especie de bienvenida al Gobierno de Juan Manuel Santos, aseguró el director de la Carrera de Administración de Empresas de la Universidad Nacional de Colombia, José Stalin Rojas. Según el investigador, -es verdad que la ‘culebra’ está moribunda, pero sigue viva y en esa situación puede ser aún más peligrosa-. Pero, ¿cómo influirá la noticia de la muerte de ese jefe guerrillero en el crecimiento futuro de la economía colombiana? Para Rojas, posiblemente no tendrá efecto alguno de forma directa en el crecimiento económico del país, aunque sí tendrá una consecuencia colateral y positiva en el crecimiento de mediano plazo.
En términos de lo que se ha dado en llamar la confianza inversionista, para el académico del Centro de Investigaciones para el Desarrollo (CID) la caída del ‘Mono Jojoy’ representa un buen punto de referencia para los inversionistas, pero Colombia ya es de por sí una nación atractiva para la inversión y el factor Farc (o guerrilla en general) ya no pesa tanto a la hora de hacer negocios. El crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) en el último año se apoyó en la minería, la industria y el comercio. Estos sectores adelantan actividades en áreas rurales y urbanas donde se siente la presencia de la Policía y el Ejército, y en los cuales la inversión nacional y extranjera se siente segura y espera un retorno de su inversión a unas tasas atractivas en el mediano y largo plazo. Así las cosas, pese a la confianza que pueda generar la posibilidad del fin del conflicto con la guerrilla, hay hechos que producen mayor preocupación y que no se pueden perder de vista para no malograr lo ganado en materia de seguridad, como el surgimiento de bandas criminales -que siguen vinculados al cáncer del narcotráfico- y la inseguridad urbana. El riesgo analizado Aunque las calificadoras de riesgo evalúan el riesgo soberano, es decir, la capacidad y credibilidad del Gobierno para honrar sus compromisos de deuda pública a largo y mediano plazo, Rojas dice que la muerte de alias 'Jojoy' solo afectará para bien el factor de estabilidad o riesgo político, es decir, aumentará la percepción para los inversionistas y analistas que el Gobierno de Santos está haciendo lo posible para garantizar la estabilidad institucional. Sin embargo, las otras variables de estabilidad macroeconómica y jurídica, no se verán afectadas por la muerte del jefe guerrillero, dado que desde hace algún tiempo, las autoridades monetarias han controlado la inflación y la tasa de interés, y desde el Gobierno se están dando señales de respeto por la separación de poderes. Ambos factores no son afectados por la acción de la insurgencia. Los empresarios nacionales Para el empresariado nacional, la muerte de alias 'Jojoy' significa un alivio y una mejora en la percepción de la seguridad, pero esta noticia por sí sola, no aumentará la inversión o aumentará el consumo. Cuando bajen las aguas del entusiasmo generado por esta noticia, los empresarios retornarán a su análisis y a las decisiones racionales para la inversión, y según los datos de crecimiento del PIB, la dinámica de crecimiento de algunos sectores tendrá que repotenciarse o suplantarse por locomotoras. La muerte del guerrillero no afectará la dinámica de crecimiento. Sin duda, a mediano plazo, el hecho de que se pueda apuntalar la seguridad con base en acciones carácter institucional va a fortalecer aún más la inversión que tiene que ver directamente con una de las locomotoras propuestas por Santos para impulsar al país: la de la agricultura. La tenencia de tierras y el resarcimiento para las víctimas Si se resuelve adecuadamente el conflicto de tierras que actualmente vive el país (que es el origen de la mayoría de sus conflictos sociales) y si se resarce correctamente a las víctimas, esto será un espaldarazo para un sector profunda y reiteradamente olvidado por varios Gobiernos y seguramente redundará en la productividad de la tierra. Así mismo, es posible promover aún más la competitividad del país. Esto se da en cuatro niveles: uno en el nivel meta, representados en valores culturales de la no-violencia y respeto por las instituciones. Otro tópico es alcanzar la estabilidad en el ámbito macroeconómico y, evidentemente, hay una evolución en este sentido. También es importante el fortalecimiento de la institucionalidad y finalmente el mejoramiento de la capacidad de las grandes, medianas y pequeñas empresarias. El progreso de todos estos niveles, en el mediano plazo, significará avanzar acompasadamente hacia un papel fuerte del Estado, una cohesión social y una ciudadanía fuerte, y un sector empresarial vigoroso que nos permita realizar el viaje hacia el desarrollo económico y el bienestar social.
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