La contabilidad debe jugar a favor de la empresa, no solo del mercado financiero |
El valor razonable es un concepto central en los actuales estándares internacionales de información financiera que se están aplicando recientemente en paÃses como Colombia y que conllevan una transformación de las prácticas contables tradicionales. Para Yuri Biondi, uno de los académicos más destacados a nivel internacional en temas financieros y contables y quien visitó la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Colombia (FCE UN), el uso de ese criterio de medición deberÃa ser replanteado, debido a que solo responde a la lógica financiera y desnaturaliza la esencia que caracteriza a la contabilidad y la información contable y financiera. Bogotá D.C., 14 de abril de 2016 (Comunicaciones FCE – CID). La contabilidad debe ser un instrumento gerencial que permita gestionar la organización, asà como fomentar la gobernanza y el control sobre los procesos productivos. Hoy, cuando la actividad contable parece haberse desvirtuado por la influencia de la lógica financiera, se hace necesario rescatar su esencia organizacional, su propia lógica, aseguró Yuri Biondi, miembro del Centro Nacional para la Investigación CientÃfica, en Francia.
Este reconocido académico italiano, radicado en ParÃs, señaló que el modelo que promueve el Consejo Internacional de Normas Contables (IASB, por sus siglas en inglés) no considera en sus propósitos aspectos como la responsabilidad corporativa o la rendición de cuentas, y se centra en los intereses y la lógica del mercado financiero.
“Se puede hacer una crÃtica seria a lo que está ocurriendo con el modelo de contabilidad que fomenta el IASB, el cual desconoce un criterio público de control contable; de hecho, no le interesa que los contadores respondan a las autoridades, a la sociedad o a un interés público general como parte de un compromiso corporativo, sino que todo se reduce a brindarle información a los inversionistas”, dijo el investigador durante la conferencia ‘Un análisis económico del valor razonable: la contabilidad como un vector de la crisis’, que se llevó a cabo el pasado 18 de marzo en la FCE UN, en el marco de la conmemoración del DÃa del Contador Público en Colombia.
Desde su perspectiva, el uso del valor razonable (criterio de medición utilizado para determinar el valor de activos y pasivos) está siendo revaluado y criticado, especialmente desde la última crisis económica global, porque se ha comprobado que no resulta funcional para los propósitos de estabilidad financiera global, puesto que solo es usado cuando incrementa el precio de un activo, pero no cuando decrece.
El resultado es claro, sostiene Biondi: “el modelo del valor razonable no es consistente con la evidencia empÃrica y tampoco con el entendimiento de lo que es el rol de la contabilidad frente a los precios del mercado. Esto se debe a que las valoraciones hechas desde el mercado pueden ser muy exuberantes intrÃnsecamente, asà que no podemos confiar en los montos que se fijan allà para determinar el valor real de una firma (una empresa o compañÃa), debido a que todo se tasa con información actual y tenemos mucha incertidumbre sobre el futuro”.
Por eso, el académico italiano manifestó que se deberÃa volver a descubrir “la lógica pura de la contabilidad”, como él la llama, que consiste en desprenderse del mercado como el lugar de referencia para fijar criterios de medición enfocados en el futuro y, más bien, volver a su rol tradicional que consiste en que la entidad empresarial y el gerente rindan cuentas por sus acciones, sus resultados y sus compromisos; asimismo, que sea consistente con otras instituciones a nivel local, en cada jurisdicción, especialmente en la protección del capital de la compañÃa y de las responsabilidades con terceros.
“De lo que se trata es de medir el desempeño, mantener el capital empresarial y, si hubiese que solucionar un problema a futuro, trabajar para que ese dinero esté ahà en 20 años, algo que no es viable con el valor razonable. Entonces, lo que se le debe pedir al contador es que suministre información especÃfica de la firma, sus procesos de negocio, su desempeño y su posición financiera, y si los mercados requieren esos datos, pues entregárselos, pero no puede ser al contrario, que los contadores tomen decisiones dentro de la empresa a partir de la información que entrega el mercado financiero, muchas veces llena de volatilidad, como ha sucedido en los últimos 15 años”, indicó el profesor Biondi.
El experto añade que se llegó a esta situación cuando se decidió cambiar la Arquitectura Financiera Internacional, en un proceso concertado por ciertas esferas de poder que sembraron la idea de que el mercado financiero global (a través de herramientas como el valor razonable) puede regularse a sà mismo, siempre y cuando haya libertad en los movimientos del capital financiero entre regiones y a través de diferentes divisas. AsÃ, según esa visión, se lograrÃa un equilibrio que suministrarÃa mejores precios y mejores soluciones económicas, conceptos que han quedado revaluados luego del derrumbe de la economÃa mundial en la crisis de 2008.
El académico italiano manifestó en su conferencia que años atrás era difÃcil ser una voz disidente en público frente a la alta financialización de la economÃa mundial, a pesar de que varios académicos de la época eran conscientes de las amenazas de esa tendencia; muchos callaron porque no querÃan irse en contra de la mayorÃa. Pero eso cambio después del colapso financiero de hace ocho años, lo que ha permitido avivar las crÃticas sobre el hecho de que los mercados financieros sigan rigiéndolo todo.
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